El Dr. Ibarra, investigador principal del Laboratorio Natural Andes del Sur, explora la integración de prácticas bioculturales en la gestión de sistemas naturales, destacando la importancia de las comunidades locales en la preservación de la biodiversidad y resiliencia en las zonas andinas del sur de Chile.

Tomás Ibarra, profesor asociado en la Universidad Católica con un enfoque en la ecología y la antropología ambiental, es investigador principal en el Laboratorio Natural Andes del Sur, donde lidera el Laboratorio Temático 3, dedicado a los modos de vida y habitar de montaña. Su formación en ciencias forestales y antropología ambiental, sumada a su experiencia en la región andina de La Araucanía, lo ha llevado a desarrollar enfoques interdisciplinarios que buscan integrar conocimientos científicos y tradicionales en la gestión de los ecosistemas de montaña.

El Dr, Ibarra explica que las prácticas bioculturales son esenciales para entender cómo las comunidades locales han manejado históricamente los sistemas naturales. Estas prácticas, que integran la naturaleza y la cultura de manera inseparable, han demostrado ser relevantes  para la sustentabilidad y resiliencia de los territorios. “Los sistemas naturales de aserríos, bosques, las mismas montañas, los glaciares, los volcanes… son gestionados a través de distintos lentes culturales que las comunidades han desarrollado”, comenta.

En su trabajo, ha demostrado cómo las huertas familiares y los sistemas agroforestales, manejados por las comunidades locales, no solo conservan, sino que también generan biodiversidad. Este enfoque cuestiona la visión tradicional de que los seres humanos son exclusivamente destructores de biodiversidad, mostrando que también pueden ser creadores y protectores de la misma.

Mirando hacia el futuro, el investigador destaca la importancia de continuar desarrollando redes sociales y ecológicas que conecten a diversos actores territoriales, desde agricultores hasta organizaciones de la sociedad civil. Así mismo, destaca la necesidad de internacionalizar los hallazgos y conocimientos del LN Andes del Sur, promoviendo su singularidad a escala global. “El sistema Laboratorio Natural Andes del Sur es único a nivel planetario por sus singularidades sociales y ecológicas, y debemos mostrar esto al mundo”, concluye.

El trabajo de Tomás Ibarra en el Laboratorio Natural Andes del Sur no solo busca preservar y comprender las prácticas bioculturales de las comunidades locales, sino también establecer un modelo de gestión sostenible y resiliente para los territorios de montaña. A través de un enfoque interdisciplinario que une la ecología y la antropología.